Estimado Lector,
La esperanza de vida ha aumentado a lo largo de los últimos tiempos, pero en muchos casos eso oculta una terrible realidad: esos años que se suman no se viven con buena salud.
Es decir, que en esos casos el avance de la Medicina solo sirve mantener con vida a personas gravemente enfermas durante más tiempo. Y lo hace a costa de todo tipo de ayudas: desde antibióticos hasta sistemas de respiración artificial y de estimulación cardíaca, alimentación por catéter, cirugías…
Ya lo ve: vivimos más, pero en un buen número de casos solo porque logramos alargar la enfermedad.
Ahora bien, afortunadamente hay quien tiene una visión totalmente diferente de todo esto…
En la Medicina Tradicional China (MTC) la longevidad (o Chang Shou) es un término de respeto que solo se atribuye a quienes han llegado a una edad avanzada en buena salud y siendo felices.
Es decir, que la meta únicamente se logra si la persona conserva el vigor físico y se siente satisfecha y plena, está en equilibrio emocional y continúa creciendo espiritualmente.
La medicina china atesora 8 grandes secretos para alcanzar el Chang Shou. Ahora está a punto de ver los 4 primeros. Los restantes se los haré llegar en un e-mail posterior, ya que es mucha información para un solo texto y es necesario que estas 8 claves se interioricen bien.
Así que le propongo adentrarse en ellos con tranquilidad y con la mente abierta.
Secreto n° 1: La meditación
El valor de la meditación reside en que es una práctica que permite calmar la mente, reducir el estrés y aclarar los pensamientos.
En realidad, se trata de toda una forma de vida para los monjes y maestros taoístas, la cual no pretendo resumir en unas pocas líneas. No obstante, usted también puede beneficiarse de sus efectos con solo 5 minutos al día.
Le propongo un ejercicio diario:
Las primeras veces que lo practique seguirán viniendo múltiples ideas a su cabeza; es completamente normal. Forma parte del propio ejercicio de liberación.
Será después de varias sesiones cuando perciba que cada vez le resulta más fácil controlar la situación y no pensar en nada, simplemente viviendo el momento presente.
Sentirá el cuerpo muy ligero y la mente relajada y tranquila. Es posible que incluso de repente vea claras las soluciones a problemas que hasta entonces le atormentaban.
Para meditar bien, asegúrese de mantener la columna vertebral -incluido el cuello- lo más recta posible, sentándose en el borde de la silla o del cojín. Con ello mantendrá una postura correcta, la cual facilita además la circulación de los flujos de energía.
Si le ayuda, también puede comenzar con alguna meditación guiada, lo que en ocasiones resulta más fácil.
Secreto n° 2: Las plantas
A lo largo de la Historia los maestros taoístas han alcanzado récords de longevidad, a menudo viviendo más de 100 años y sin mostrar los signos habituales del envejecimiento.
No es de extrañar, entonces, que fuesen ellos los que a lo largo de los siglos hayan asesorado a las familias chinas más importantes, entre ellas las reales e imperiales.
Existe, sin embargo, un secreto clave en su excepcional longevidad: una combinación especial de plantas medicinales que desde siempre han jugado un papel importante en el mantenimiento de su fuerza.
Una de ellas en concreto se encuentra en muchas recetas de fórmulas “secretas” para la longevidad. Se trata de los bulbos de loto sagrado (Nelumbo nucifera), un nenúfar de propiedades desintoxicantes y muy rico en antioxidantes.
Pero también podrán beneficiarle enormemente otras plantas de origen chino algo más accesibles en Occidente y con importantes efectos antioxidantes, como por ejemplo la esquisandra (Schisandra chinensis), el kudzu (Pueraria lobata) o el ginkgo (Ginkgo biloba). Puede tomarlas bien en infusión, bien en complemento de fitoterapia.
Secreto n° 3: El Qi Gong
Los maestros taoístas han practicado ejercicios que regeneran el flujo de energía vital -lo que en medicina china se denomina “Qi”- a lo largo de los siglos.
Pero es que en los últimos años se ha demostrado científicamente que estos estimulan la respuesta inmunitaria y la autocuración del organismo, además de que ayudan a reducir el estrés y favorecen el equilibrio emocional.
Le propongo en este caso practicar uno de esos ejercicios de Qi Gong (literalmente, “trabajo de energía”) ahora mismo:
Una vez haya concluido, se sentirá más despierto y lleno de energía.
Mi consejo es que, siempre que sea posible, haga este ejercicio con los pies metidos en un barreño con agua caliente. De esta forma favorecerá todavía más el flujo de energía.
Pero, ojo: este es solo un ejemplo. ¡Hay docenas de ejercicios de Qi Gong! La clave está en cómo se practican: los movimientos deben ser en cualquier caso suaves y lentos, de ahí que en general no impliquen ningún riesgo, se tenga la condición física que se tenga.
Cada ejercicio, eso sí, tiene un objetivo diferente: calmar la agitación o el nerviosismo, luchar contra la rigidez articular, relajar los músculos, captar la energía de la Naturaleza para fortalecer el cuerpo… Asegúrese de realizar el que mejor responde a sus necesidades.
Secreto n° 4: Los automasajes terapéuticos
Los masajes son técnicas de autocuración simples pero efectivas que, incorporadas a sus rutinas, pueden sumar años de buena salud a su vida.
Aquí van dos ideas de automasaje interesantes:
Asegúrese de calentar un poco sus manos frotándolas una contra otra antes de comenzar los masajes. De ese modo serán más eficaces.
Como le dije, para una primera aproximación a las claves de la longevidad positiva de la medicina china esta información es suficiente. De hecho, es importante que repase e interiorice bien estos 4 conceptos antes de continuar.
En cualquier caso, próximamente publicaremos la continuación de este post con los otros 4 secretos restantes, así que ¡esté muy pendiente!
Sumamente sabias sus recomendaciones. Soy practicante de Qi Gong y doy fe de sus buenos resultados. Gracias