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El mejor cuento de Navidad no es un cuento…

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“A mi madre la operaron un 21 de diciembre, así que ese año p asamos la Nochebuena en el hospital, mis hermanos mis padres y yo, brindando con champagne y poniéndonos ciegos de unas gambas deliciosas que trajeron Pepa y Antonio, amigos de mis padres, familia para mí.

20 años después, también en Nochebuena, era mi madre la que me cogía de la mano mientras me ponían la quimio en el Ramón y Cajal. El hospital de día estaba de fiesta, las enfermeras cantaban villancicos y los aparatos de la quimio estaban rodeados de espumillón. Con el tratamiento corriendo por mis venas me fui a casa, me duché, me puse mi pañuelo blanco y plateado -el más elegante que encontré- y nos fuimos a casa de mi hermano. Y allí vino Papá Noel, y mis hijos tuvieron su Navidad. Brindamos todos juntos por Nico, mi sobrino, que estaba en camino.

A mis 45 años he vivido muchas Navidades, todas especiales, porque a mí, en Navidad, me invade la infancia y veo elfos en cualquier rincón. Pero quizá aquellas fueron las más especiales, las más mágicas. Estuvieron llenas de amor, de ilusión y de esperanza.

Siempre me acuerdo de los pacientes, cada vez que paso por un hospital cierro los ojos y les mando un poquito de energía. Cuando me cruzo con alguien enfermo por la calle le sonrío y, si nuestras miradas se cruzan, le miro fijo y le guiño un ojo, para que sienta mi empatía; es un código secreto.

Pero estos días quizá me acuerdo un poquito más… porque ellos son los que necesitan toda la magia, amor y cariño del mundo. Porque aunque aquellas Navidades fueran mágicas y especiales también fueron injustas. Porque nadie debería estar enfermo nunca, pero… en Navidad…

Para ellos todo mi amor. Desde aquí les guiño el ojo y les mando un poquito de energía. Les pienso.”

Carta abierta de Blanca M. G., lectora de Tener S@lud.

Tisanas estación

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Todas las personas que hacemos Salud, Nutrición y Bienestar nos sumamos al deseo de Blanca y enviamos a todos los enfermos del mundo fuerza, esperanza e ilusión en su recuperación. Para todos ellos, un guiño muy especial.

Feliz Navidad


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